lunes, 6 de octubre de 2014

6 Octubre 1896 Eloy Gonzalo lucha en Cascorro en búsqueda de un acto heroico

Eloy Gonzalo, el héroe de Cascorro


Aquella fría noche del 1 de diciembre de 1868, alguien dejó un pequeño bulto a la puerta de una inclusa en Madrid. El pequeño, recién nacido, llevaba una simple manta que lo envolvía y una nota como única explicación :
"Se llama Eloy Gonzalo García está sin bautizar y es hijo de Luisa García" 

Eloy Gonzalo pasó pocos días en la inclusa. Diez días después el pequeño es adoptado por el matrimonio formado por Francisco Díaz Reyes y Braulia Miguel. 
Por la profesión del padre, que es guardia civil, el niño pasa sus primeros años entre San Bartolomé, Robledo de Chavela y Chapinería.  Dicen las malas lenguas que la pareja lo cuidó hasta que dejó de percibir la renta que recibían mensualmente de la inclusa para su manutención, momento en que fue de nuevo abandonado. Pero lo más probable es que lamentablemente los padres adoptivos murieron y Eloy se quedó otra vez solo.

Aprendió algunos oficios para subsistir, pero finalmente sólo vio una salida en el ejército en el año 1889. Sería aquí donde desarrollaría su carrera, de esta manera en 1891 ya era cabo.
No terminaron aquí sus desventuras puesto que años después descubrió que su novia, cuya boda estaba próxima pues había solicitado el pertinente permiso militar para contraer matrimonio, le era infiel con su teniente, al que amenazó con un arma; el Consejo de Guerra le condena el 25 de Abril de aquel año a 12 años y un día de prisión militar mayor, ingresando en el Presidio Militar de Valladolid.

Eloy Gonzalo como Soldado

Tuvo la oportunidad de salir de la cárcel poco tiempo después ya que se benefició del Real Decreto que permitía alistar presos, y es que España en esta época necesitaba hombres para su guerra en Cuba.

De esta manera, Eloy fue destinado al Regimiento de Infantería María Cristina núm. 63 y cruzó el Atlántico llegando a la provincia de Camagüey, en abril de 1896, al puesto de Cascorro, formado por unos fuertes que defendían la población con el mismo nombre.

El 22 de septiembre comienzan las hostilidades en este punto, pues el fuerte queda cercado por los mambises (El término Mambises (mambí, en singular) se utiliza para referirse a los guerrilleros antiespañoles de Cuba, soldados que en el siglo XIX participaron en las guerras por la independencia.) 3.000 rebeldes sitiaron a 170 españoles hostigándoles  con cañones. El bombardeo era constante y a pesar de la petición por parte del enemigo de que rindieran la plaza, los españoles deciden resistir con su capitán Francisco Neila al frente.

Poco habituados a las condiciones del clima tropical, especialmente durante el verano, los soldados españoles destacados en Cuba sufrieron numerosas bajas por enfermedades.


El principal problema del asedio es que este se estaba haciendo desde la misma población de Cascorro, algunas casas cercanas pudieron ser destruidas o desalojadas, pero otras seguían siendo el principal foco del ataque, por lo que el Capitán Neila tomó la determinación de pedir voluntarios para incendiarlas. 
Para ser el elegido, Eloy Gonzalo aduce ser huérfano y soltero y por lo tanto no tener a nadie a su cargo.


"Soy inclusero y no dejo a nadie que me llore o me precise"



Pidió una lata de petroleo para incendiar la casa y una cuerda para que le atasen y que cuando cayera muerto su cuerpo pudiera ser recuperado por sus compatriotas.


Salió del fuerte corriendo todo lo que pudo mientras las balas silbaban a su alrededor, logró llegar a la casa y utilizar el combustible para provocar un enorme incendio que la devoraría en poco tiempo, aún así pudo salir de aquel infierno y regresar a duras penas al fuerte.

Tal acción hace que la moral de sus compañeros se eleve pese a lo complicado de la situación y provoca un contraataque. Pocos días después una columna española al mando del general Adolfo Jiménez Castellanos liberó la posición consiguiendo romper el cerco de los mambises que tuvieron que abandonar finalmente Cascorro.


Por su valiente acción Eloy Gonzalo recibiría la Cruz de Plata al Mérito Militar pensionada con 7,50 pesetas mensuales y el capitán Neila la Laureada de San Fernando. No por ello dejaron de combatir hasta el final, de tal manera que nuestro héroe moriría en Cuba víctima de la disentería en el Hospital Militar de Matanzas en 1897. Otras fuentes indican que la causa de su muerte fue la malaria, o incluso fiebres tropicales.

Tras la derrota final del 98 sus restos fueron repatriados y fue enterrado en el madrileño cementerio de La Almudena junto a otros destacados militares de las guerras de Cuba y Filipinas.

La gesta de Eloy Gonzalo apenas tuvo relevancia militar en la guerra. Sin embargo, la figura del héroe de Cascorro se hizo muy popular en Madrid probablemente por su condición de expósito y por la necesidad de exaltar un rasgo de heroísmo individual en una guerra.


Monumento dedicado a Eloy Gonzalo. Plaza de Cascorro
La Corporación Municipal, bajo la presidencia de Alberto Aguilera, acordó el 20 de octubre de 1897 inmortalizar a Eloy Gonzalo como héroe y propuso la erección de un monumento. Se convocó un concurso al año siguiente, que ganó Aniceto Marinas. El acto de su inauguración se incluyó entre los fastos que se organizaron para celebrar la jura de bandera del rey Alfonso XIII, quién lo inauguró el 5 de junio de 1902. La estatua fue fundida en Barcelona, en la casa Masriera y Campins. La popularidad del héroe llevó a modificar la denominación de la plaza, entonces llamada de Nicolás Salmerón, pues enseguida empezó a citarse por todos los madrileños como “de Cascorro”, por lo que en 1913 el Ayuntamiento procedió oficialmente a cambiarlo.
Aniceto Marinas (1866-1953), escultor de reconocido prestigio, estuvo pensionado por la Diputación de Segovia para estudiar en la Academia de Bellas Artes de San Fernando y más tarde en Roma. Participó en las Exposiciones nacionales e internacionales en las que obtuvo varios galardones y en muchos casos sus obras fueron adquiridas por el Estado. Realizó numerosos monumentos para todo el territorio español. En noviembre de 1903 fue nombrado Académico de San Fernando y el 1966 se le dedicó una Sala especial en la Exposición Nacional de Bellas Artes, conmemorando el centenario de su nacimiento.




Estatua completa realizada en bronce del soldado Eloy Gonzalo García; figura realizada con gran realismo, expresividad y movimiento. Aparece en pie y caminando firme hacia su objetivo, va vestido con el uniforme de las tropas del ejército colonial, con la guerrera medio abrochada, armado con fusil Mauser y machete a la espalda; en la mano derecha lleva la tea encendida y en la izquierda sujeta una lata de petróleo; en la cintura lleva la cuerda atada con la que sus compañeros lograron recuperar su cuerpo.
Está firmado A. MARINAS en el lateral derecho y en el lateral izquierdo aparece la placa con el nombre de la fundición, MASRIERA Y CAMPINS / FUNDIDORES – BARCELONA





de sus molduras en forma de corona de laurel- y un cuerpo con pilastras de capiteles historiados de bronce en las esquinas, sobre el que se dispone un cornisón moldurado. En cada lado del cuerpo principal, de caliza, aparecen incrustadas lápidas de mármol que con el mismo tipo de decoración superpuesta de bronce, a modo de verja, soportan las inscripciones: en el frente, EL / AYUNTAMIENTO /DE MADRID / A / ELOY GONZALO / 1901; por la parte posterior, CASCORRO /1897, y en los dos laterales, sendos escudos de la villa; el cornisón, que tiene una de sus molduras en bronce representando una corona de laurel, recibe el basamento propiamente dicho de la estatua, en mármol rosa.





Guerra de Independencia cubana


La Guerra de Independencia de Cuba (o la Guerra de 1895) es el nombre con el que se conoce a la última guerra por la independencia de los cubanos contra el dominio español y se trata de una de las últimas guerras americanas contra el Reino de España. La guerra se inició el 24 de febrero de 1895 en un levantamiento simultáneo de 35 localidades cubanas, en el Grito de Oriente (antes conocido como Grito de Baire) y terminó en 1898 con la rendición del ejército colonial español ante el avance militar estadounidense, con la asistencia y el apoyo de los mambises (miembros del ejército independentista cubano) en la conocida generalmente como Guerra hispano-estadounidense (llamada «Guerra hispano-cubano-estadounidense» dentro de la isla).

No hay comentarios:

Publicar un comentario